Irma Gruenholz, ilustrando con las manos

FacebookTwitterWhatsAppLinkedInPinterest

¿Dónde está el límite entre la ilustración y la fotografía? Son ese tipo de preguntas que te planteas cuando miras el trabajo de gente como Irma Gruenholz, que, aunque tenga un apellido un poco raro…

FacebookTwitterWhatsAppLinkedInPinterest

¿Dónde está el límite entre la ilustración y la fotografía? Son ese tipo de preguntas que te planteas cuando miras el trabajo de gente como Irma Gruenholz, que, aunque tenga un apellido un poco raro de leer vive y trabaja en Madrid. ¡Y cómo trabaja! Cuando veas lo que hace comprenderás a que viene nuestra pregunta…

Ella se define como una ilustradora tridimensional. ¿Y eso en qué consiste? Pues en que no se conforma con el papel y el lápiz, ni con el Illustrator, ni con el Photoshop. Va más allá. Crea sus personajes moldeando  arcilla, plastilina u otros materiales a los que puede dar forma para hacer sus creaciones. Después los pinta y los dispone en fondos y con objetos que crea ella también. ¿La ilustración? Una fotografía bien hecha y bien iluminada que se convierte en eso, en ilustración.

Para colmo tiene un estilo muy personal en el diseño de personajes y todo eso que hace, lo hace tan tan tan bien, que el resultado es una maravilla. No lo decimos sólo nosotros (ni tú, que también lo irás diciendo por ahí cuando termines de leer el post), es que ha sido seleccionada para exposiciones, concursos y libros de ilustradores internacionales y ha trabajado para clientes  como Coca-Cola, BBVA o Imaginarium.

Irma es una joya, igual que sus piezas.

 

 

 

 

 

Suscríbete y no te pierdas nada


Recibe nuestra newsletter para estar al tanto de todo, todo y todo

Comenta por aquí

FacebookTwitterPinterestLinkedInWhatsApp