8 Posters para decirle Tararí a San Valentín

8:30 de la mañana. “Ya está aquí, ya llegó es el gordo so cab***, ya está aquí, ya llegó…” Es lo primero que se escucha en el Estudio a golpe de cacerolazo. Hay gente al…

8:30 de la mañana. “Ya está aquí, ya llegó es el gordo so cab***, ya está aquí, ya llegó…” Es lo primero que se escucha en el Estudio a golpe de cacerolazo. Hay gente al que el santo de las flechas le hace la gracia justa y que sienten el mismo apego por este día que “La Hornillos” por el inglés.

Nosotros somos muy de haber sufrido por amor y como habíamos leído cierto artículo de un periódico con grapas sobre si se podía no ser hortera en San Valentín, pues hemos encerrado al Sr. Sleepless durante ochenta minutos (con chupa-chups de cola y agua, eso sí) para hacer estos carteles para vosotros. Ocho carteles, ochenta minutos, a lo que saliera, a lo loco.

1. Mi corazón es una letanía trasnochada: Ays… Si es que no tenemos remedio, somos unos machacones y tenemos el alma hecha pa’ sufrir. Deberíamos tomarnos las cosas un poco menos a pecho y os lo decimos nosotros, que somos “los reyes del drama”.

2. Mi corazón es piel de reyerta: Pues sí, esto es también para ti y para nosotros y para todos esos que tenemos más costuras que una camiseta del Lefties.

3. Mi corazón es el ciego de la esquina: Eso a veces pasa, más de las que quisiéramos y es que nos vamos a enamorar de quién de nosotros no se enamora a lo Camilo Sesto. Si eres de los que, como nosotros, te enamoramos mal, dale a Cmd(Ctrl)+P. También puedes imprimírtelo si tienes toda la cara de Guillermo Montesinos.

4. Mi corazón es el tonto de la clase: Y caemos otra vez, y otra, y otra más… Es que somos tontos, tontísimos, tontacos, tontérrimos. Con la de gente buena que hay por ahí.

5. Mi corazón es un robot ‘to’ roto: Es posible que ahora tengamos ese sentimiento “chungo chungo” de sentir que nuestro corazón está roto, que es un autómata con los cables “pelaos”, ¡pero oye! Siempre puede haber alguien dispuesto a repararlo… Cuestión de paciencia.

6. Mi corazón se mea en tu cara: Ese momento en el que rompes con alguien y estando ahí, con toda la bajona, llega un amigo y te dice “si estás mejor así, créeme, que estás mejor” y te toca los coj***s. Eso sí, con el tiempo te das cuenta de que tu colega tenía razón, siempre la tienen, y sólo tienes ganas de miccionar
sobre la cara de tu ex, saludable acción por otro lado.

7. Mi corazón es el castigado sin recreo: Te tragas todo el peñazo, las 5 horas de clase, diariamente, religiosamente, amargamente y todas esas palabras que terminan en mente y cuando llega el momento de divertirse, el momento de decir “¡wujua!” vas y te quedas sin él… ¡Sal! Nombre común del cloruro sódico y de lo que tienes que hacer cuando el corazón está de bajón.

8. Mi corazón al revés es un culo, que se limpia con tu foto: ¡Es que eso apetece! ¡Anda que no! En un gran porcentaje de ocasiones, lo que tu cuerpo te pide el día de San Valentín es coger la foto de tu ex y usarla para un fin tan loable como el de limpiarse el pandero. Y el que diga que no… ¡MIENTE!

Todo esto es para aquel que ha sufrido alguna vez por amor, porque sí que hay gente mala, pero oye, que también hay mucha gente buena :D
(no hay que perder la esperanza). También es para aquellos a los que Sanvi, como le llamamos nosotros, se la trae un poco al pairo… ¡FELIZ SAN/NO VALENTÍN!
(Era la única forma de meter un ano encubierto :) )